* Mi rincón *

 Muchas veces me da por pensar en qué pasaría si esta ventana que tengo abierta con el mundo virtual, se cerrara automáticamente, sin saber el tiempo de mi silencio.
Es difícil saber desde mi lado, si mi blog sirve para algo o si  gusta como está, si aburro o si encanto.
Me preocupa, en cierta manera, no tener constancia de las opiniones de quienes pasan de puntillas, si expresarse, por mi espacio.
Sabéis que me esfuerzo cada día de los que escribo, por haceros grata la estancia.
Diseñé yo sola lo que hay puesto en el blog, sin más ayuda que mi paciencia y mi gusto personal.
Unos días no se me ocurre nada y los más, suelo tener una palabra o una frase.
Ronda  ella en mi cabeza, sin haberla elegido. Le doy vueltas para darle forma y sentido y conseguir un escrito que me guste y que os guste a vosotros, algunos o muchos.
No me preocupa mucho saber si volvería o no a escribir aquí o en otros sitios.
Cuando una se va, se ha ído, con  razones poderosas o simplemente las suyas.
Tomamos otro camino por el que se anda mejor y por eso decidimos cambiarlo un día de repente.
Escribo para mí, como necesidad  de expresar con letras, situaciones, estados de ánimo o sueños que existen en mi imaginación.
Estoy sola en esta empresa de mi página personal, después de haber pasado por dos muy queridas para mí, de las que guardo muy buenos momentos y con las que sigo en contacto y colaboración permanente.
Aprendí mucho de mis compañeros de entonces, cada uno tuvo su ingenio y sus maneras de expresarse, aleccionadoras para mí.
De todos se aprende algo  o mucho y es justo reconocer su mérito personal y darles las gracias en conjunto.
Un@s ya no están en mi vida virtual y otr@s siguen siendo entrañables para mí, a lo largo del tiempo.
Contaron tod@s, cada un@ a su manera, con mi aprecio personal y mi tiempo dedicado a ell@s.
Camino sola aquí, en pura soledad que no me pesa, ni me asusta.
Cuando vengo es porque quiero, a éste nuestro rincón, mientras pueda hacerlo y vengaís vosotr@s.
Gracias a tod@s, de corazón.

- Wppa, te dedico a tí este texto con mi especial cariño, amiga mía.

* Piel de cordero *

La piel de cordero suele cubrir a un animal inocente. Eso es lo que  nos contaron en la escuela.
Caminan por la vida personas así, se cubren o disfrazan ante los demás y nos muestran una actitud preparada concienzudamente.
Sus fines no son claros a la vista cuando eligen a su presa o víctima.
Adoptan un talante amable, cercano, amistoso o amoroso y altruísta, según les convenga.
Halagan a su objetivo, casi hasta la exageración, sobrecargándolo de atenciones.
Aparentan dar mucho de sí mismos, cuando en realidad no ofrecen nada destacable.
Lo que pretenden es absorber y anular a la persona elegida, para su propio y exclusivo beneficio.
Suelen ser, como tutores ( padres, madres o abuelos), personas que presumen de su abnegación  y sacrificio con sus congéneres. Como si nadie lo hiciera mejor que ellos y desprecian la valía de los demás, hasta el extremo de la burla.
Debajo de esa pelliza falsa existen varios puntos a tener en cuenta.
De un lado, el supuesto " lobo" carece de autoestima y  fuerza el cariño de otros, llenándolos de halagos y atenciones, casi sin venir a cuento, haciéndoles creer que son excepcionales.
De otro, sale su verdadero yo, que muestra sin ningún rubor, cuando no obtiene lo que espera de su víctima: dedicación plena  y exclusiva a su persona.
Despliega entonces  toda una suerte de improperios y frases manipuladas, haciéndose la víctima dañada.
Recuerda al perjudicado con insistencia, cuánto ha hecho por él y el pago que no ha recibido, con reproches continuos, para generarle  un sentimiento de culpa.
Sus presas, las víctimas, suelen ser débiles, conciliadoras, con miedos y poca autoestima y acaban perdiendo la poca voluntad que tenían.
Los lobos, o chantajistas, no reconocen casi nunca que tienen un grave problema y mucho menos se tratan en especialistas.
Usan a su antojo las relaciones personales para sus fines, con métodos poco o nada éticos.
Fomentan, con sus comentarios maledicentes, el crear una mala y errónea imagen de las personas que no acceden a su dominio.
Son capaces, en algunos casos de hundir sin piedad a sus víctimas, ya que no empatizan jamás.
Son personas de muy escaso nivel cultural y sin valores éticos y morales. Se creen sus propias mentiras y las muestran como verdades.
Manejan la manipulación  y la murmuración con  gran destreza.
Lo mejor  o más aconsejable con estos personajes, no es ayudarlos a que cambien, porque eligieron ser así y se creen justos y con poder sobre los demás.
Cualquier ayuda que se les brinde a estos " lobos", genera más dependencia con ellos, que tienen una gran capacidad de persuasión y muy malas artes.

Huyamos lejos,  pues de estos lobos con piel de cordero, que ni son corderos, ni quieren serlo.

-Justicia es la constante y perpetua voluntad de dar a cada uno lo suyo. (Ulpiano).

* Mi beso *

Tengo ganas de inventar un beso que no existe todavia.
Tú lo dibujas en mis labios, cuando los tocas con los tuyos, sin mediar palabra alguna.
Me gusta sentir tu ternura, sin preocuparme de nada más.
Descubrirte ahora, tan cerca de mí boca, esperando tu señal.
Tus manos vienen de envolver mi cintura, abiertas como alas en mi espalda, sintiendo su vaivén de caricias.
Las mías se enlazan en tu cuello, como si de un baile lento se tratara.
Besarte y sentir un cosquilleo que cruza mi espalda y me asola, cual llama incandescente.
Besarme tú, abandonarme contigo y descubrirnos juntos en puro silencio.
Recorrer la geografía  de tu cuerpo, con mis dedos que te sedan, mirándome en tus ojos.
Sentir tu corazón y tus latidos alocados y amarnos en este amanecer tan bello.
Olvidarnos de prisas y cosas por hacer, en el tiempo que arrancamos a la vida.
Volver a besarte muchas veces, adorarte con mis ganas y mi vida.
Tengo ansia de tus besos, de los míos, de los nuestros.
Ven, al balcón de mi fantasía, amor no tardes.

Guardo  para tí, mi beso inventado. El principio de todo.

* Cosas Nuestras *

Vengo a menudo, fiel a nuestro encuentro de almas, aquí, a mi rincón de puertas abiertas.
Y con la confianza que te brindo, eliges tu momento y te paseas despacito, en el tiempo que dispones.
Hay ocasión para todo, en medio de las prisas que nos empujan y hacen que dejemos lo importante de la vida, para momentos mejores.
A veces, todos, incluso yo, necesitamos una carcajada, un buen consejo, ver unos ojos sonrientes o simplemente leer algo que ensanche el alma.
Echamos de menos una música muy bella, un perfume delicado y las palabras que nos hacen falta en ese instante y las encontramos.
Nos inunda una sensación tierna, como una suave brisa en la cara, en la cima de los sueños.
Nos embarga la paz, como bálsamo de nuestras heridas, que cicatrizan lentamente, con el tiempo.
Asimos la  libertad  que el tiempo se llevó a otro lugar, sin darnos cuenta.
Hallamos un detalle especial, que nos despierta el ánimo y meditamos despacio, haciendo nuestro el pensamiento, como broche de oro.
Todos somos necesarios, cada uno de su lado. Yo sin ti, no tengo razón de inventar, ni soñar con mis escritos.
Quien te escribe con el corazón, te agradece tu presencia y fidelidad.
Ojalá tu disfrute sea tal y como yo me lo propuse.
En mi ánimo no existe buscar una ovación con premio o pleitesías, sino contarte mis sentimientos, mientras el mundo rueda.
Hago y deshago, para que tu visita te sea cómoda, dejarte un regusto dulce y las ganas de volver otro día, por las nuevas.
Me esfuerzo, porque sé que debo renovar y no morir en el empeño.
Me dibuja sonrisas el que tú, seas quien seas, estampes tu firma y unas palabras de aliento, a tu manera.

Y mientras vengas tú  a mi rincón, éste de "Cosas Nuestras", vendré yo.

* Ven...conmigo *

Te invito a pasear bajo la lluvia , sin relojes, ni compromisos que nos reclaman y enseñarte este lado de mi mañana.
Déjalo todo, cierra la puerta y vámonos sin importar dónde acabamos, ni cuan larga sea la distancia.
Vámonos y te alegrarás de cometer esta locura conmigo, corazón.
Toma mi mano y cobíjate  a mi lado, en nuestro paraguas de la vida.
Ven, yo te lo pido, déjate llevar a mis sueños, mientras el cielo llora y la mañana nos contempla.
Ámame una vez más, cogida de tu brazo, por una calle cualquiera, con tu mirada  y con tus besos en mis labios.
Lánzate a mi reclamo, sin testigos y brindemos con la copa de la esperanza, por tanto amor como sentimos.
Disfrutemos juntos esta locura tan dulce, aunque llueva afuera sin descanso.
¡Sé un loco, amor mío, sélo  y ven!.
Mi paseo perfecto está esperándote, conmigo.

* San Valentín *

* Nosotros *

Ayer no escribí  aquí cuánto te quiero, no me hizo falta, no estuve.
Estaba contigo amor y te lo dije con un beso.
¿O lo hiciste  tú?. ¿Los dos?.
¡ Qué más da quien comenzó el beso!.
Esperaba como una adolescente, al despertarme, ese pellizco de dulzura, en mi corazón anhelante que tú me provocas, cuando te ausentas.
Llegó tu Te Quiero a mis ojos y leí emocionada el Amor que me profesas.
Mandé de vuelta mis besos a tus labios, al instante y en respuesta.
No olvides nunca, corazón, que Te Adoro.
Y extrañé no poder abrazarte en ese instante, por la prisa de la vida.
Te esperé paciente, con la dicha que inunda mi pecho.
Quise que, si cabe, fuera un día más especial de cuantos puedo regalarte, a tu lado.
Sigo caminando contigo y a tu lado, segura y feliz.
Te Amo ayer hoy, mañana y Siempre.

* Somos y estamos *

Hay días que son tan iguales, que es mejor que las horas pasen como quieran hacerlo, con la prisa o languidez del momento, sin pararse a pensar en su provecho.
Hay pensamientos que son tan fútiles, que acaban dispersos en las mañanas, sin que dejen huella alguna en nuestros recuerdos.
Suceden hechos que,  por reiterativos, se convierten en un diario, no por ello menos importantes, que los que son amigos de la casualidad.
No hay empeño, en que cada jornada pinte distintos tonos a la anterior, más bien dejamos que el día nos sorprenda con su gama de colores, en nuestro caminar seguro.
Y existen voces amigas y queridas, tantas o tan pocas, en nuestra memoria, que resuenan todavía o callaron para siempre en el devenir de los tiempos.
Y un día, sin saber por qué, vuelven a resonar suavemente dentro del alma y nos embarga la ternura de otra época.
No nos abandonamos al destino por dejadez o hastío, quizá nos adaptamos a las circunstancias, con la madurez que nos dió el paso de los años.
Ya no hay preguntas a las que responderse una.
Y el dolor de antaño se evapora lentamente. El olvido se lleva con el viento, las lágrimas, que nublaban nuestro horizonte.
Seguimos día a día,  fortalecidos por dentro, con manos amigas y corazones entregados a la causa.
Caminamos con la frente alta, dibujando sonrisas a nuestro paso y un perfume discreto de detalles.

Que ser somos y que estar, aunque en silencio a veces, estamos. Siempre.

* Estos pensamientos se los dedico a una muchachita, a la que quiero mucho en la distancia: Angels *

* Señor marqués *

Sin pretender igualar a los excelsos periodistas, que se estrujan la mollera, día sí y día también,  con sus artículos tan impecables, os escribo hoy sobre "el marquesado" más reciente, que todos hemos leído en prensa.
Es cortesía  y derecho del monarca conceder, mejor en vida que muerto, este título honorífico a personas con merecimientos demostrados en el campo que destacan.
El protocolo, manda el tratamiento de Ilustrísima al beneficiario del título, a su esposa legítima, si la hubiere y a los hijos que le sucedan a su muerte, por orden de nacimiento.
Este nombramiento es más  importante que el de conde y menos que el de duque.
No les son  otorgados ni privilegios, ni territorios, a los marqueses.
Siguen abonando, de igual modo a las arcas públicas sus impuestos, como cualquier ciudadano que cotice y si, por usar tal título han de pagar algo más, será simbólico .
No es lo mismo que reserve Pérez una mesa en un restaurante, que la reserve el señor marqués.
Menos mal que el marqués, duque o conde los elige el rey de España y es aprobado, supongo yo, por el Estado.
Y es un alivio para quien os escribe que dichos títulos, ni se compren ni se vendan.
Sólo de  pensar que propusieran como marquesa de San Blas,  a la princesa del pueblo, ( llamada así por clamor televidente de los "belenistas") y que tuviéramos que llamarla Ilustrísima doña Belén, me daría idea del dislate del criterio, que concede tal pleitesía.
Los dos marquesados que me vienen a la memoria reciente, elegidos por el rey Don Juan Carlos I de España, son: el escritor peruano, Vargas LLosa  ( por su “extraordinaria contribución, apreciada universalmente”, a la literatura y a la lengua españolas) y el entrenador de la selección española, Vicente del Bosque, ahora marqués del Bosque.
Tengo entendido que el monarca, antes "Su Gracia Real", pregunta al interfecto, de qué querrá  llamarse marqués, dejando a voluntad de elección el sitio físico (o no), de las preferencias del nuevo marquesado.
Me gustó mucho que hayan sido elegidos estos dos ilustres señores y  pasen así a engrosar las páginas del elenco de Grandezas y Títulos Nobiliarios.
Me sorprende, no obstante, que Vargas Llosa, con su dilatada carrera como escritor, no se inclinara por un marquesado más rimbombante, que el de su  propio apellido.
Así mismo Don Vicente del Bosque, pudo haberse llamado Marques Del Mundial, o marqués de La Roja o por qué no, marqués Del Balón.

Todo sea para dar el  toque del esplendor de otros tiempos y aumentar el prestigio del estado crítico, en el que está inmersa a nuestra querida España.
Esperemos que lo ostenten dignamente y que sea para bien, señores marqueses.

* Texto dedicado a una amiga  muy especial :  María *

* A mi princesa *

Te espié en tus sueños de princesa, mientras dormías. Quise grabar en mis retinas la ternura que irradiaba tu cara, tan perfecta y adorada por mí, desde que eras apenas recién nacida.

No se oía sino tu respiración pausada, como el primer día que te tuve entre mis brazos, por fin. Arropada por un lienzo, menos suave que tu piel de niña, sentí tocar el cielo cuando naciste. No quería lastimarte, tú, tan delicada, con mi primer abrazo entre nosotras. 

Tan frágil como el cristal parecías, tan perfecta como la más preciada obra de arte y tan viva como el día que nos alumbraba. 

Tanto amor sentí de pronto, que lloré de gozo. 

Dí gracias a Dios por concederme la dicha de verme reflejada en tí, con toda una vida por vivir.
Vida con nuestra familia, hasta que volaste como una blanca paloma, en busca del amor que te tocaba sentir en tu corazón enamorado, ya mujer.
Fuí la mejor madre. De día con tus pasos y de noche con tus sueños e ilusiones.
Creciste sana y alegre y te convertiste en una mujer perfecta para mí . 

Preparada para crear tu propia familia, con el amor que te enseñé, día a día, te ví partir de tu nido primero.
Fuiste madre como yo y serás la mejor, como yo.
Dáles a tus hijos lealtad ante sí mismos, regálales buenos consejos, para que el camino por donde anden, sea el adecuado.

Insísteles en lo que tú creas que les favorece, guíalos por la senda del amor y la unión familiar. 

Ama a tu esposo, como compañero y padre de tus hijos.
No olvides a tus padres en tu diario, te dimos una vida, la mejor que pudimos y estamos satisfechos de tí, nuestra princesa.
Vuelvo a llorar con la misma emoción de amor de madre, pero distinta,  porque es inmensa. 
Aquel día que me dije: 

-¡Qué guapa eres princesa mía!.

Dedicado a una amiga muy especial, en quien me inspiré para escribirlo.

* Blanquito *

Cuando una, en el tiempo que dispone para contar algo que siente o le preocupa, se dispone a ello, normalmente  motivada por alguna señal o pensamiento reiterativo, que le da pié a inventar un escrito.

Quien escribe, no lo hace por obligación, al menos yo. 

Obedece a  una necesidad relativa de comunicar  a los lectores, hechos vividos o pensados, pensando en  que, quien lee quedará  impregnado del "sabor" que  se pretende.

Hoy sigo sin entender a esos padres complacientes, que en fechas navideñas regalan cachorritos a sus hijos y pasado un tiempo, se deshacen de ellos, dándose mil excusas y quitándose el problema de enmedio.

El domingo, mi hija  se encontró en una carretera comarcal un cachorrito desorientado, que enseguida hizo migas con ella.

Parecía bien educado y se le notaba que había estado cuidado y alimentado, tras una revisión del facultativo, ayer lunes. Aún tenía la señal del collar que le pusieron en su día.

-"Será de gran tamaño cuando crezca y esto suele pasar com mucha frecuencia, que los dueños ven que crecen mucho y los abandonan a su suerte", aseveró la veterinaria.

Es un perro blanquito, con una mancha canela en un ojo y las orejas tambien canelas.
Simpatiquísimo, de pelo corto y suave. Ägil y nervioso, pero no tiene nombre, ni casa todavía.

Yo os hablé ya del mío y tener dos juntos, constituiría para mí un problema añadido.

Se lo acaban de llevar a un refugio de perros, a la espera de algún ciudadano responsable que le dé una oportunidad y regalarle  miles de días de lealtad a sus dueños.

Me quedo muy triste con su marcha, se llega a querer a un perro en dos días y sé que pensaré muchos días en él, mi blanquito.

Tan triste estoy que.. no puedo seguir por hoy, lo siento.