13.1.11
* Mi despertar *
Un rayo de luz, suave como el terciopelo, me arranco hoy a la vida, colándose por las rendijas de mi ventana, hasta alcanzar mi rostro adormecido.
Venía de un azul cielo, que tomó como vestido, entre el ir y venir de las nubes lentas y blanqueadas, que se perdían a lo lejos.
Y hallé, después de tantos días a mis gorriones inquietos, en un árbol que se salvó de desvestirse en el otoño, quizá por rescatarlos del relente de la noche, incluso de la escarcha congelada en el extremo de sus ramas.
Me saludaron con sus trinos alocados, disputándose con jerarquía inquebrantable, las migas que les daba, sin calcular que había para todos, mientras yo me sonreía al contemplarlos.
Un piano saltarín desgranaba con destreza sus arpegios agudos, anegando mi silencio y mi mañana.
Violines respondones callaban entre sus pausas y mecíanlo cuando sonaba, en un cántico de amor y besos.
Una y otra vez, las canciones insisten en melodías con besos, que se quedaron dormidos en el tiempo, sin borrar ni uno sólo de su memoria infinita.
Boleros que suenan en mi despertar azul, con sus voces cadenciosas.
Amores de cuento de hadas, con sabor azucarado y suspiros al cielo azul.
Nostalgias, cuando el cielo elige ser plomizo y llora de pura rabia, inundando con su pena los pasos de la gente que no se para a reflejarse.
En el fondo del alma, sueñan amores de mil colores, con sus cielos y sus nubes, pero siempre siempre, con sonido de bolero enamorado.
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Hola los boleros me transportan a una linda etapa de mi infancia tuve una tía que tenia una orquesta famosa en el norte de chile.
ResponderEliminarAdemas son tan románticos te prometo que voy y vuelvo.
Saludos
Maria Antonia
Los boleros son para bailar muy agraditos y enamorar UN ABRAZO
ResponderEliminarGracias por ESTAR.
ResponderEliminarUn beso, JMF