14.8.11

* La mentira *


La mentira tiene patas cortas, narices largas y empleados fieles.
Me entristecen  los embustes de la gente, de la vida y en el amor también.
No comprendo la mentira como defensa a ultranza de una situación que no debió producirse, entre dos que se amaban o que eran amigos, hermanos o colegas de trabajo.
Nada puede justificar un revés  así a la otra persona, que puso el corazón entero, un amor sin medida en su compañero elegido.
Muchas veces me pregunto si esas personas son así  siempre y porqué razón tan poderosa  hacen y repiten esas actitudes perniciosas.
Cómo no calibran las consecuencias de ese acto tan infantil e inmaduro y tiran por la borda todo el afecto construido entre ellos, seguramente con  una base cimentada únicamente en el propio interés.
Siempre se descubre todo, es cuestión de tiempo y aún así niegan con arrogancia y excusas razonadas, lo evidente.
Se justifican una y otra vez ante las pruebas claras que no admiten, pensando que faltar a la verdad es algo necesario y suficiente en su diario.
La humildad no hace acto de presencia en quienes mienten, ni antes, ni durante, ni después de ser descubiertos.
Por supuesto, el arrepentimiento es relativo, falso y temporal y se vuelve a las andadas, porque todo es egoísmo y no por el amor que se suponía.
El perdón al doliente, como consecuencia de su traspiés no se reclama, en el  convencimiento de que la misma absolución se da por supuesta.
El mentiroso observa desde su cuna los comportamientos de sus mayores.
Aprende que engañar es una ventaja  para conseguir sin esfuerzo los objetos o las personas, jugando con ellas a que maneja la verdad.
El niño dice mentiras en la misma medida en que sus fantasías se hacen presentes, para confundirlas con realidades. 
El adolescente es un mentiroso cuando su encuentro con el mundo real, le causa frustraciones o contratiempos. 
El joven es mentiroso, en tanto y en cuanto no se siente capaz de afrontar las verdades que le son adversas. 
El adulto es mentiroso cuando no ha logrado superar los obstáculos que le puso la vida y por lo tanto para sentirse el triunfador que nunca fue ni será. 
Por último, el anciano es mentiroso cuando no se perdona  a sí mismo los errores que ha cometido en su vida.
La mentira intoxica y mata el amor,  la amistad y los sentimientos, de modo instantáneo, porque se nutre de lo insano y de lo que no fue nunca verdad.
La capacidad de olvido de los afectos adquiridos, curiosamente en un mentiroso es inmensa.
En poco tiempo tiene candidato sustituto, para ser protagonistas de otra  nueva devoción.
Los mentirosos suelen dejarse querer cómodamente  y no aportan  nada  relevante al otro, sabedores del brillo que emanan desde su pedestal de mentiras.
Pierden mucho más tiempo en elaborar tramas de sainete o intrigas palaciegas, que en mirar dentro de sí mismos con valentía y humildad y extirpar el cáncer que corroe sus pocas virtudes descafeinadas.
Exponen una realidad de sí mismos magnificada y poco creíble a  los ojos ajenos. 
Trabajan con destreza su yoísmo y pregonan a diestro y siniestro cuanto tienen y cuanto valen, cada día de una forma  tan diferente como incierta.
Lo único de verdad de todo ésto es que sienten orgullo por ser como son y por sus actos justificados.
En ellos, por último, la verdad no es mentira y la mentira es siempre la verdad.

"El peor castigo de un mentiroso no es que no se le crean los demás, sino que él mismo es incapaz de creer o confiar en otros" 





5 comentarios:

  1. Hola mi querida Inés, ciertamente la mentira es odiosa, detestable, pero no nos libramos de ella ni con las mentiras piadosas. Siempre he luchado contra ellas, pero ya ves en que sociedad vivimos, ejemplo la clase política.

    Pásate por mi blog, el día 27 de JUNIO, lunes a por un premio de TERNURA. ¿Me lo aceptas?
    Te dejo un beso
    Sor.Cecilia

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  2. De verdad es una exposición perfecta de lo que es el mentiroso Aún diría más cuando encuentran estas gentes alguien inocente,puro,sin maldad que lo acogen por las apariencias,se sienten mas seguros por que deslumbran con falsos brillos,cuando mienten a otras personas y estas las creen,se envanecen y se creen superiores sin parar en mientes el daño que pueden hacer. Se puede hacer dos cosas guardarse la amargura el engañado o mirándolo a los ojos desmontar uno por uno sus engaños y hacerle ver que no era tan inteligente.La persona embustera va cavándo su tumba poco a poco haciéndo de su vida una bola de humo sin consistencia y lo peor de todo es que se miente a si mismo y entonces si que llega a lo mas bajo y execrable del ser humano.Es una pena que haya gente asi tan vacuos y necios en su comportamiento

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  3. Has hecho una exposición perfecta, todos conocemos gente así, que hace de su vida únicamente la mentira y el daño.

    En fin, supongo que la vida les devolverá el daño que hacen.

    Besos

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  4. Por desgracia, la mentira forma parte de nuestra vida diaria y de nuestra cultura hipócrita.
    Hay mentirijillas inocentes que ocultan una trastada infantil, mentiras piadosas para no molestar a alguien, mentiras de conveniencia para justificar una falta al trbajo o un retraso y cosas asi, sin gran importancia.
    No obstante hay mentiras creles que pueden destrozar aun persona y son mas miserables cuando se hacen a concisncia y a víctimas inocentes, ilusionadas y entregadas, hundiendo su nautoestima y su reputación..
    Tamboien hay mentiras interesadase institucionales, que buscan desprestigiar y ningunean los méritos de personas excelentes en su trabajo.
    Estas son terribles porque viene de gentes sin moral ni escrúpulos, mediocres frustrados que no toleran el trinfo de los mejor dotadoas e intentan destruirles profesional y psicológicamente.
    Esto se da mucho últimamente en instituciones y empresas y es "Mobbing" tan conocido pero tan dificial de demostras y tan pernicioso para la persona que lo sufre y mas penoso aun cuando tiene raices poíticas o apoyo implícito de personas con cargos ganados apor via "digita" y sin demostrar nuingun curriculum birllante (Son eso que "tienen estudios de.........." y quieren dar lecciones a doctorados universitarios y machacarles si se interponen en sus intenciones descabelladas.
    Por ultimo hay mentiras trascendentales, nacionales, de grandes colectivos fanatizados casi cósmicas, de consecuencias terroróficas. Los nazis y los bolcheviques las utilizaron muy bien "Una mentira repetida 100.000 veces se convierte en una verdad, decía Goebbels, Ministro de propaganda del III Reich y de esta forma se forjó el Holocausto del peblo judío...
    Con mi maldición a los canallas, mi comprensión y apoyo a las víctimas y mis mejores deseos a las personas de buena voluntad.
    Recibe un saludo afectuoso.
    Salvador

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  5. Tiempo ha que no venía por este espacio donde la quietud es norma y donde la sed del espíritu halla palabras que se hacen necesarias y, lo que es más plausible, suficientes para saciar a aquella.
    Y, entre artículos íntimos, encuentro éste que habla de la mentira y de la dificultad que acostumbran a tener quienes no la practican para encajarla en este puzzle que es nuestra experiencia vital.
    Me asaltan las dudas acerca de si es más difícil acoplar la falacia en sí misma o ensamblar a quienes la tutean, cuando estos satélites forman parte de nuestra órbita.
    Quienes hacen de la falsedad mochila de su viaje, es normal que tengan guardados episodios desagradables, invariablemente sufridos por terceras personas. Pero estas lágrimas suelen llorar en unos ojos que les son ajenos. Sucesos guardados herméticamente y para siempre, ya que no es recomendable hurgar donde la conciencia anida. Sarpullidos en el alma e insomnios les huyen .
    A veces, más bien tarde que no precisamente pronto se descubre lo que se ha fabulado con sutil delicadeza y promiscuidad en los detalles. Se acaba casi siempre, no como éxito de investigación de un CSI particular sino encontrándose de bruces, por casualidad, para desgracia de quien globos de colores infló con las palabras obsequiadas, sin cicatería en los detalles, lo que no concuerda con lo que realmente somos y que carecemos, en suma, de la mayoría de los atributos con que nos hemos emperejilado.
    Pero ¿ y si quienes tienen que ver cómo realmente somos carecen de la agudeza visual necesaria ?. ¿ Y si hasta que nos descubren hemos alcanzado, total o parcialmente, los deleites, placeres y goces para lo que hemos ingeniado toda esta sarta de cualidades, aptitudes y facultades de diversa índole ?. En definitiva, si nos hemos beneficiado ya, ¡ Que me quiten o bailado ! dirá más de uno.
    Las relaciones humanas deben procurar la simbiosis y no el parasitismo que es el germen de la mentira.
    La humildad es una actitud que no acostumbra a vestirse de etiqueta ni adobarse de presunción alguna y que suele quedar bien, para los prestigitadores de la palabra dada por cierta, como limosna al salir de misa.
    El arrepentimiento falta tanto a la verdad como la mendacidad que caracteriza a quien miente como algo habitual. Y la ingenuidad suele ser el apellido de quien pide explicaciones al mentiroso ante la falsedad descubierta sin advertir que un embuste oculta a otro.
    No hay que olvidar, como tu bien dices, que la mentira hace a quien la practica depositario de la admiración de quienes son rehenes de su creencia. Y suele suceder que es mayor el escarnio padecido cuanto más ridículo se advierte uno de la sencillez de la patraña que nos embaucó.
    Y tampoco, aprovechando la ocasión y el lugar, debemos olvidar de donde venimos casi todos los que aquí leemos. Bebemos de una fuente inagotable de siete caños. Caños por los que manan abundantamente los embustes, engaños, bolas, trolas, cuentos, enredos y calumnias. ¿ Qué seríamos la mayor parte de nosotros que en él hacemos acopio de " amistades " sin dar vacaciones a la verdad ?. ¿ Qué atracción ejerceríamos sobre los demás y cómo refulgiríamos con tanta luminosidad ?. ¿ Qué banco nos daría mayores intereses por la fantasía empleada para congregar a nuestra grey ?. ¡ Bendito chat ! dirán muchos.
    No se debe ir a comprar a un supermercado con hambre ni a un chat con la soledad como único abrigo, porque la compulsión se subirá a nuestro carrito. ¡ Que no se me olviden los pañuelos de papel !. Estén o no de oferta.

    Un proverbio judío dice que con una mentira se suele ir muy lejos pero siempre que no tengamos la esperanza de volver atrás nunca.

    Un abrazo sincero Inés.

    Youtube Manu Chao Mentira seferh ( seferh es quien sube la versión que a mi me gusta ).

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